Para nuestra siguiente parada, yo estaba buscando un lugar Romántico para ir con Verónica y la historia o el inconsciente colectivo indicaba que Venecia debía ser nuestro próximo destino ya que es considerado uno de los lugares más románticos del mundo por su singular arquitectura y sus bellos canales, sin duda fue una mágica experiencia.
Nuestro viaje tuvo bastantes inconvenientes en su fase inicial, estábamos escapando de un frente de mal tiempo en Inglaterra el cual había obligado a cerrar carreteras, aeropuertos, había retrasos en los trenes y en definitiva estaba todo colapsado, llegamos con más de 2 horas de retraso al aeropuerto, yo ya me había resignado a comprar tickets en el próximo vuelo (Con el costo que ello significara), pero para sorpresa nuestra el vuelo a Venecia estaba con más de 3 horas de retraso (Gracias nieve por favor concebido).
Gracias a Dios pudimos despegar y aterrizar en la hermosa ciudad de los canales.
Un recorrido nocturno por la ciudad
Después de llegar nos dirigimos inmediatamente a nuestro hotel en el que tiramos nuestras maletas y sin importarnos la hora o que ya estuviera oscuro, nos volcamos de inmediato a pasear por las callejuelas y canales de la ciudad, nuestra primera parada fue el Casino de Venecia, pero no quisimos entrar a probar suerte.
Esta no era mi primera vez en Venecia, pero para Vero si lo era y su percepción fue la misma mía en mi primer viaje, “Pensé que era hediondo, como muchos dicen”, pero la verdad es que aparentemente he tenido suerte porque ni en este ni en mi anterior viaje sentí ningún mal olor.
En nuestro recorrido nocturno seguimos maravillándonos con los hermosos canales y lo hermoso que se ven sus casas con las luces amarillas otorgando una mágica experiencia, seguimos hacia el famoso puente de Rialto, el más antiguo de los cuatro puentes que cruzan el Gran Canal (1591), Posteriormente seguimos nuestro maravillosos camino hacia la Plaza de San Marcos, principal destino turístico de Venecia que recomiendo de sobre manera visitarlo de día y de noche, al igual que ver sus bellos canales iluminados. Para volver a nuestro hotel, cerca de la estación de Santa Lucia, nos fuimos en Vaporetto, un verdadero bus que recorre el Gran Canal de Venecia.
Recorrido por los canales y callejuelas
A la mañana siguiente continuamos el recorrido por los canales y callejuelas maravillándonos con la arquitectura y la forma de vida en los canales, abastecimiento, estacionamientos, alcantarillados?, etc, en definitiva una magnífica obra de ingeniería. En el recorrido fuimos a visitar un pequeño mercado y pudimos apreciar in situ las diferentes horas de inundación, ya que lugares donde habíamos estado la noche anterior estaban bajo el agua. Dentro de las cosas más recordadas de este recorrido fueron las vistas desde el puente de Rialto.
Plaza de San Marcos, Torre del Reloj, Campanario y la vista aérea de los canales,
Un paso obligado de cualquier visita a Venecia es su famosa plaza repleta de palomas y que ciertas horas del día está bajo el agua. Tiene la forma y tamaño actual desde 1177.
Los iconos de la plaza son la famosa Basílica de San Marcos, la torre del reloj de San Marcos y el campanario de San Marcos, el cual extrañamente está al frente de la Basílica y no pegado a ella. Es un lugar ideal para poder apreciar desde las alturas la magnífica vista de la plaza, del gran canal y los canales de la ciudad desde una altura de 50 metros.
La Basílica también puede ser visitada y en el interior se encuentra un interesante museo junto a los restos de San Marcos, traídos desde Alejandría en el año 832 cuando se construyó la basílica, en su fachada se encuentran la réplica de 4 caballos de oro de San Marcos, los originales están en el interior para protegerlos de la lluvia.
Finalmente, otro de los iconos más impresionantes a un costado de la plaza, es el palacio Ducal, símbolo de la gloria y el poder de Venecia.
Navegación en góndola
No podía faltar en nuestro recorrido un romántico paseo en góndola, sin importar el precio es absolutamente recomendable hacerlo, recorrer los canales es una experiencia única, apreciar la arquitectura, pasar bajo los puentes con las técnicas de los gondoleros para que no raspe el techo y finalmente cuando el gondolero se pone a cantar típicas canciones italianas hacen del recorrido algo inolvidable.
Un hito del viaje es el paso por el puente de los suspiros, que recibe ese nombre no por lo romántico, sino que porque unía los tribunales donde los criminales eran juzgados con la cárcel y era el último lugar donde podían ver el agua y por ende daban su último suspiro.
Paseo al Lido de Venecia.
Durante la tarde tomamos la decisión de navegar hacia el Lido de Venecia, otra isla mar adentro que funciona como barrera para Venecia y sus canales, es en esta ciudad con extensas playas donde se realiza el Festival Internacional de Cine de Venecia. Es un hermoso lugar para apreciar las costas del mar Adriático.
Sin dudas que nuestro viaje a Venecia fue marcado por emotivos y románticos momentos, pero lo mejor de todo es poder vivir esta experiencia juntos, maravillarnos con la arquitectura y sus canales, si lo que realmente buscas como próximo destino es algo romántico, Venecia debe estar entre tus imperdibles.